La inspiración
Tras recibir el encargo para la creación de 7 esculturas para el museo al aire libre de La Plana de l'Arc, a lo largo de una semana, recorrimos la comarca en busca de la inspiración necesaria que nos condujera a una idea que sirviera como punto de partida para dar forma al nuevo proyecto en el que nos estábamos embarcando.
A lo largo de nuestro viaje por La Plana de l’Arc en busca de inspiración para este maravilloso proyecto, fuimos descubriendo en los diferentes pueblos la relación directa de la silla con “a la fresca”, una antiquísima costumbre de sacar una silla a la calle al final de la tarde para ponerse al día de las últimas novedades o simplemente compartir con los vecinos el fresco en las calurosas noches de verano.
La silla finalmente se convirtió en el elemento inspirador de nuestro proyecto artístico y empezamos a preguntar, a profundizar en su historia, en el oficio de sillero, en su significado simbólico y poético…
Desarrollo de la idea. La silla, un hito en el camino
- Forma y color. 7 sillas, 7 colores -
Para la forma de nuestra silla nos inspiramos en una silla tradicional huertana, de madera y factura humilde, de asiento bajo, conocedora de cientos de historias de la comarca. La mayoría de las sillas de masía que hemos visto en La Plana de l'Arc están pintadas de diferentes colores. Es raro que una silla de este tipo acabe en la basura, algunas de ellas tienen muchísimos años y han sido repintadas muchas veces. Para la selección de los colores nos inspiramos en la escala del arco iris, (7 pueblos, 7 colores), aunque nuestro arco iris va a ser de 6 colores más el blanco, la suma de todos ellos.
Producción
La carpintería de las sillas estuvo a cargo de Incofusta, una empresa de ingeniería y construcción en madera ubicada en Chiva (Valencia), especializada en el diseño y producción de estructuras de madera para exterior. Para la producción de la carpintería de las sillas se realizó una cuidada fusión entre maquinaria de última tecnología con unos acabados artesanales de la madera.
Traslado a Cabanes
Las siete sillas llegaron en un trailer de 20 metros desde la carpintería de INCOFUSTA (Chiva, Valencia), a la Casa de la Cultura de Cabanes (Castellón) y fueron desfilando una por una bajo el diestro mando de David Romero, de LOGISTICA ROMERO. (Moncada, Valencia), sorteando la altura de los arboles frente a la entrada, para poder instalarlas dentro de la gran carpa en la que durante dos semanas se desarrollaría el taller colaborativo para encordar los asientos por parte de voluntarios de dentro y de fuera de los siete municipios de La Plana de l'Arc.
Taller colaborativo de encordado
Tras la llegada de las sillas dio comienzo el “Taller de arte colaborativo y encordado tradicional” en el que tuvimos la gran suerte de conocer y aprender con el artesano encordador Tomeu Perelló, y contar con la participación de 45 voluntarios de dentro y de fuera de la comarca de La Plana de l'Arc.
Contando con 5.000 metros de cuerda de cáñamo natural, el objetivo era reproducir los siete patrones elegidos, inspirados en sillas encontradas en estos siete municipios. Con todo ello el reto era poner en valor el antiguo oficio del encordador recordando técnicas que están quedando en el olvido, y dar un homenaje a esa antiquísima costumbre de salir “a la fresca” que sigue viva aún en estos pueblos manteniendo el sentimiento de comunidad.
También tuvimos la gran suerte de recibir a los grupos de estudiantes del instituto y colegios de Cabanes, y a todos los que sintieron curiosidad y quisieron venir a conocer de cerca el proyecto VIA SET CADIRES. Incluso pudimos recibir a gente que nos trajeron algunas sillas viejas con las que pudimos conocer mejor los patrones de la zona.